A medida que la campaña electoral se mueve hacia adelante, es responsabilidad de los candidatos a ambos lados del pasillo el reconocer al más importante conductor del gasto en el cuidado de la salud – la enfermedad crónica - y presentar un plan concreto para tratar a esta amenaza humana y económica.

Ochenta y seis centavos de cada dólar gastado en el cuidado de la salud se gasta en el tratamiento de personas con enfermedades crónicas. Las enfermedades crónicas son las principales causas de muerte y discapacidad. Uno de cada dos estadounidenses vive con al menos una condición crónica y casi tres de cada cuatro estadounidenses mayores tienen una o más de una condición crónica.

La buena noticia es que la mayoría de las enfermedades crónicas se pueden prevenir o ser manejable. Con un sistema de salud que detecta, trata, y gestiona mejor las enfermedades crónicas, podemos cambiar la historia de la atención de salud de nuestro país, mejorar la vida de millones de estadounidenses, y fortalecer nuestra economía mediante la lucha contra las enfermedades crónicas.

Únase a nosotros en el #Fight4Health y demande el liderazgo sobre el tema de todos nuestros candidatos.